Me siento frágil, muy frágil al sentir como tu mano coquetea con
la mía, acariciando así la más bella
aurora. Noches repletas de auténtica fragilidad que juega a asomarse por las
rendijas de las persianas que dan forma
a esas ventanas, ventanas del tiempo que yacen ahí tendidas en ese diván a la
espera de un beso o tal vez de una
caricia que no llega…
Frágil
es como me siento y como se muestra este suspiro, que sin quererlo se me
escapa, acurrucándose en eso que denominamos recuerdos…Recuerdos que residen en
lo más profundo de mi misma y que se acuna en esta mirada nítida y bella que
tan solo, busca con cierto desespero que llegue el atardecer, esa víspera fría
que me hiela el alma…Frágil es como suena el grito que despiertan mis mañana y
mis amaneceres, auroras que agitan sus alas ….Son esas primeras luces de
colores que visten y emergen cada vez que el alba se
adormece, luces que aguardan en esa caja de sorpresas, que tan solo pudo abrirla
al llegar este fiel anochecer, que
siempre me acompaña…Frágil es la vida en sí misma; la vida de aquel que ama y
que espera con cierto desespero que
llegue ese encuentro tan deseado, un encuentro donde la magia es la auténtica protagonista, es ese
hechizo que se enreda con los amaneceres, con las madrugadas y cada vez que la luna hace que la oscuridad vista de desconsuelo la vida…
Magnífico este relato colmado de versos y prosas que nacen de tu bello corazón, gracias por tan lindo relato!! :)
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