En estos instantes
vacíos, donde no hay tiempo para nada ni para nadie, siento como esta lluvia me
arropa y como cae a solas sobre mí espalda.
Evaporando así, ese frágil recuerdo, bueno tú
recuerdo .Siento como esos nubarrones oscuros me nublan la vista y hacen
que me quede ahí sentada, acurrucada, observando aquello que sucede detrás de
los cristales de estas ventanas. Ventanales que me protegen de la locura de
este mundo, ventanas que entre sus miradores se cuela una especie de aire, un
viento frío que me acaricia la cara mientras yo, contemplo sin cesar y desde mi
muralla como esa agua es capaz de transformar en llanto todo lo que toca, y
como desciende del cielo sin piedad alguna…
En ese instante salgo de mis neuróticos
pensamientos y me observo en ese ventanal con esa mirada perdida entre estas
gotas de lluvia fría, una fina estampa que borra y hace desvanecer el mundo, cuando
eres consciente de que lo que necesitas es tan solo un abrazo.
Acompañada por este aire frío regreso a mí, a mis ideas
locas, siento como toda mi vida pasa ante mis ojos sin pagar peaje alguno, y vislumbro sin cesar, esos errores cometidos sin intenciones y esas promesas que se
quedaron ahí; en un papel….Veo cada vez un poquito más
difuminado cada uno de esos segundos en los que la magia de la felicidad me abrigaba y me empapaba de alegría el alma, mientras esta lluvia
sin sentido desciende sobre mis pensamientos…
Lluvia que acaricia estas letras
que tienen la intención de trasmitir que las emociones son reales y que como con
el tiempo descubrimos que nosotros ya no somos nosotros, si no tan solo, somos
la sombra que creemos ser, esa miscelánea de ilusiones que hace que la vida tenga
algo de sentido…Y ahora que yo misma sigo sin ser yo, cada vez más próxima a
encontrarme con mi propia esencia , encarcelada entre estos muros bañados de
locura…
Quiero ser ese viento que se cuela por tu ventana, esa carcajada que
desprenden tus labios y esa calidez de este abrazo que
muchas veces no damos…
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