Lloran
las nubes por tu ausencia, son entonces las lágrimas que acunan entre susurros
a la luna, ya que el sol, no anida en las esquinas de estos sueños semidormidos
y es este viento el que hace volar a esas palabras que un día abandone entre tus
abrazos. Mi deseo de encontrarte ahí, en mis recuerdos, se refleja en esos
charcos pisados y chapoteados por las risas inocentes de los niños. Sonrisas
que hacen que los días como estos, valgan la pena ser vividos. Inocencia en
forma de chubasqueros y botas de colores,
que le otorgan a estos días de lluvia melancólica una alegría escondida.
Alegría, que acude a mi como un susurro con ese viento de poniente, arrastrada
por esas gotas de agua que sin querer o tal vez queriendo, intentan limpiar mi
alma…Un alma dolorida, repleta de tiritas, por esas nostalgias sin nombre de
este pasado no tan pasado…
Me
gustaría agarrarme a ese viento inagotable para alcanzar así tus besos, unas
caricias que no nos dimos ,porque la oscura noche nos atrapaba…Porque apenas existían
razones ni tiempo alguno, ahora solo recurro a esos sueños envuelta entre las
mantas de un pasado sin dueño, sueños adormilados pero que siguen estando aquí,
conmigo, porque forman parte de mi misma…
Sueños que no se extinguen por ser
soñados y es así, cuando sin querer miro a este cielo encapotado , atrapado por
las lágrimas de estos nubarrones, que me agitan el alma bruscamente y
despiertan en mí, esas nostalgias .Recuerdos que me llevan a ti, y me hacen
creer que cada día que pasa, estas aquí; más cerca de mi…
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