Me busco, acurrucada entre las
sabanas mojadas por el sudor, entre esos suspiros que mi cuerpo sin querer emite..Atrapada por esas noches vacías de recuerdos y de ilusiones infantiles, que nacen y mueren, ahí conmigo… Noches, en
las que sin querer, el aroma de los jazmines se cuelan por mi ventana junto al sin sabor de mi tristeza.Tristeza que desencadena en llanto, llanto que se transforma en la mas fría de las lluvias, es esta lluvia adormecida que sin ella quererlo. Se deposita en los balcones, en las aceras y
en las lunas menguantes de estas noches sin dueño….Noches en las que la huella de la soledad viste de
azul oscuro el alma, y el corazón de esos poetas que queremos ser poetas;
jugando ligeramente con estas palabras mudas y con ese sentimiento tan dulce. Embadurnando de amor y dulzura estas palabras, que resultan ser una caricia suave para el alma …
Oscuridades
donde los senderos resultan ser irreconocibles, pareciendo así, que forman
parte del otro hemisferio…En estas noches sin alma, sin risas y sin caricias,
es cuando mi alma adormilada por esas canciones de cuna , siente muy de cerca
eso que a veces nos atrapa y nos domina…Eso
que parece blanco ,pero que si lo miras bien es tan negro, eso que parece necio pero pero a la vez es tan dulce…Eso
que los humanos tenemos la mala costumbre de llamarlo; soledad
No hay comentarios:
Publicar un comentario