jueves, 18 de septiembre de 2014

Sin ti...

Te  busco entre el tiempo sin comas ni puntos, te busco en estas noches locas, que saben a soledad y están perfumadas por esos jazmines que en un pasado tú me regalaste…Jazmines con olor a lluvia y a balcones insomnes, donde tan solo la oscuridad orienta esa luz, una luz que tú sin saber muy bien un amanecer decidiste apagar…Cada vez que tu imagen acude a mi recuerdo, siento como las emociones me envuelven y me acunan, me acompañan en esta soledad a oscuras…Añoro esas manos que cada noche me abrazaban y esas huellas que me hacían despertar bajo los susurros de la locura…Huellas que hacían que mi alma se extraviara lentamente, por los senderos vacíos del olvido, y me invitaban  a ser por un instante  feliz junto a tus propios sueños…Pero ahora mi cuerpo desnudo,  es acariciado por esas sabanas vacías, recovecos donde tan solo vive la tristeza de esta soledad tan real y tan tangible…Una soledad carente de besos y de caricias dormidas, una soledad que me atrapa como ese invierno frío, y que tan solo es capaz de recordarme que tú fuiste algo pasajero ..O tal vez, alguien que el tiempo aparto de mi alma  y de mi cuerpo…Así sin más;  sin dar explicación alguna, te marchaste dejando tatuadas en mi alma esas emociones dulces que cada alba me regalabas…

domingo, 14 de septiembre de 2014

SOLEDAD...


                      Me busco, acurrucada entre las sabanas mojadas por el sudor, entre esos suspiros que mi cuerpo sin querer emite..Atrapada por esas noches  vacías de recuerdos y de ilusiones infantiles, que nacen y mueren, ahí conmigo… Noches, en las que sin querer, el aroma de los jazmines se cuelan por mi ventana junto al sin sabor de mi tristeza.Tristeza que desencadena en llanto, llanto que se transforma en la mas fría de las lluvias,  es esta lluvia adormecida  que sin ella quererlo.  Se deposita en los balcones, en las aceras y en  las lunas menguantes de estas noches sin dueño….Noches en las que la huella de la soledad viste de azul oscuro el alma, y el corazón de esos poetas que queremos ser poetas; jugando ligeramente con estas palabras mudas y con ese sentimiento tan dulce. Embadurnando de amor  y dulzura  estas palabras, que resultan ser una caricia suave para el alma …
           Oscuridades donde los senderos resultan ser irreconocibles, pareciendo así, que forman parte del otro hemisferio…En estas noches sin alma, sin risas y sin caricias, es cuando mi alma adormilada por esas canciones de cuna , siente muy de cerca eso que a veces nos atrapa y  nos domina…Eso que parece blanco ,pero que si lo miras bien es  tan negro, eso que parece necio pero pero  a la vez es tan dulce…Eso que los humanos  tenemos la mala costumbre de llamarlo; soledad


sábado, 13 de septiembre de 2014

Locuras....

                         Cada amanecer  ella despertaba y sentía que su cuerpo rebosaba  de palabras, palabras vacías, era como si en el trascurso de la noche alguien hubiese ido llenándola poco a poco con susurros, sueños esculpidos letra a letra en su alma que yacía ahí; dormida… Lejos de sentirse extraña, cada vez que abría los ojos sonreía, adoraba el  amanecer, porque la luz de un nuevo día la invitaba a ser feliz…Palabras que se hacían reales en el preciso instante en que los primeros rayos de sol y los últimos de luna entraban por la ventana. Ese segundo, es  en el que sentía entre sus brazos a la persona que amaba, aquella a la que se había abrazado antes de caer rendida a los pies del  mundo de los sueños.
Sentía como esas palabras  dulces, se le escapaban de sus labios rojos  y junto a ellas, se deslizaban unas perlas azules  que recorrían su rostro. Sentía como esos vocablos sin sentido, querían abandonar su piel, y echar a si a volar con su propio suspiro…Palabras que atrapaba una a una con la delicadez de sus manos, intentando que ninguna quedara olvidada, y pudiera echar a  volar como si de una paloma mensajera se tratara. Para ella todas esas palabras que aquella noche le habían dejado, tatuadas en el alma eran importantes…         Palabras desordenadas que cada despertar, ella sin saber muy bien porque, se dedicaba a darles sentido por su piel desnuda….Bajo las caricias de la dulzura,  las esparcía   suavemente por su cuerpo, y las mecían así; los suspiros de sus sueños..                                                                                           Cada amanecer ella  construía, caricia a caricia, esas pequeñas y maravillosas locuras que quería compartir con el mundo…


lunes, 8 de septiembre de 2014

jardín de flores marchitas....

Siento como desafina el aire que acaricia sin recelo la penumbra, que envuelve de susurros esta tarde oscura, y como ese viento que  sin querer coquetea con el borde de este ocaso, tan vacío y silencioso…Suspiros que se acercan sin yo quererlo a ese jardín de flores marchitas; el jardín de mis temores…
Percibo como lentamente, el peso amargo de la niebla, recorre sin pedir permiso, la soledad que corre por mis venas. Acariciando entre susurros adormilados, esa inquietud que sin querer me envuelve el alma, bajo este manto de canciones  que atrapan mis recuerdos y los esconden entre estas sabanas vacías, una melodía inconexa, que me repite lentamente al oído que las horas pasan a 
destiempo, adulando suavemente esos sueños muertos…Sueños que se quedan ahí; en el tintero…Sueños locos que van luchando a contraviento, agotando los suspiros de esta vida hasta el último segundo, sueños que intento plasmar entre estas letras; instantes, emociones y sentimientos…
        Por si acaso estos momentos  alguna vez, se transforman en recuerdo, siento  como esta luna que acuna el silencio de la noche, acompaña a mi alma enloquecida y embravecida por ese vacío tan sincero. Luces y sombras se columpian en el balancín del tiempo donde existen los recuerdos envueltos entre ese polvo que desprenden los fantasma de un pasado muy presente…Amaneceres ignorantes, que recorren los suburbios de mi alma, 
con ese llanto tan sincero…


jueves, 4 de septiembre de 2014

Besos y caricias...

                Estos besos, estas caricias y estos abrazos que  mis zapatillas van  abandonando  a su paso, y junto al compás del aire, van acariciando esta realidad tangible, inconexa... Viento que susurra y acompaña a esta lluvia de suspiros vacíos, aguacero  del que nacen esas carencias infantiles que sin querer dormían plácidamente entre los recuerdos añiles y entre las sonrisas de un pasado muy presente…

                
            Caricias desconocidas pero que con sonido, van surcando tú  propio camino, para que escuches sus propias delicias y recojas, lentamente estas flores en bandada, con tu mente enamorada. Sobrevolando así,  sin alas este jardín, un edén  sin sueños. Es entonces cuando; mi propia alma susurrante de suspiros adormilados, te regalan sin motivo esos besos, que vuelan en ese pañuelo blanco y que sin saber muy bien porque llegan hasta tu mirad. Empapando sutilmente y  como si  de lluvia se tratara, esa alma enamorada…Un alma que vive por 
ese suspiro extraviado con el paso de los años, y que ríe buscando 
ese aire que ella sin querer respira…


lunes, 1 de septiembre de 2014

pétalos de esperanza...

A veces creo que es fácil olvidar, aquello que es inolvidable y  vestir de colores a la nostalgia, cuando le das permiso a que la música entre por tus tímpanos y se acomode así en tu cabeza…Renovando esos recuerdos vacíos y repletos de pétalos de rosas oscuras, sientes como esas notas musicales se balancean en tu mente y como al escuchar esas melodías, las emociones fluyen, desde ese silencio tan propio; tan íntimo….

Esas notas son capaces de llevarse todo, absolutamente todo y dejar sin ideas a esa mente arrojadiza, de pensamientos inconexos. La música, tiene magia, porque sin darte cuenta esas letras musicales te abrazan y te acunan entre esos brazos invisibles, y te animan a amar sin palabras, tan solo con halagos…Es entonces, cuando sientes, que tan solo existes tu misma. Tú, ante ese tablero de ajedrez, llamado vida...
En la que, a veces se gana y otras se  pierde, en la que a veces se ríe y otras se llora, sientes como en ocasiones esa melodía te aparta del ahora, como si de unos amantes indiscretos se tratara...La música te envuelve el alma con caricias y te aparta por un instante de este mundo. Te coge de la mano por las noches y te acompaña, sin saberlo, a ese cosmos de ensueño. Donde viven las hadas que siembran a su paso deseos, y dejan depositada lentamente y en silencio, la huella de la esperanza en el corazón. Porque a pesar de todo; la esperanza es esa llama que sin querer existe en
 algún lugar de ti misma...