lunes, 4 de junio de 2012

El circo de lo absurdo.

                 Quería extraviarme por un instante, quería dejar a un lado esa mala costumbre que tengo; Esta costumbre dormida, en la que  me dedico a contemplar este pasar de los relojes, vislumbrar como pasa el tiempo al compás en el que nacen planes y retos que se difuminan por desidia o tal vez por una cuestión de  mala suerte…
Eso es lo que me digo yo a mi misma, esa es la conversación que mantengo conmigo….Mientras sigo dando rienda suelta a mi imaginación através de este bolígrafo casi gastado, por el paso del tiempo. Escribo sentada en una mesa de este bar, de la vila de gracia, un bar desierto donde el humo, las risas y  los llantos se han desvanecido con el paso acelerado del tiempo…
          Creo que la realidad, me contempla desde los adentros con cara perpleja, preguntándose a si misma que es esto, de escribir a deshoras y porque tiendo a desahogar mis ansiedades en un papel, una hoja de papel desierta y dormida….En ocasiones esta fragilidad que me caracteriza sale desde mi misma a borbotones y en otros instantes me da la sensación que me voy desangrando poco a poco. Entonces me susurro a mi misma la gran duda si sigo viva o talvez soy un reflejo de la vida tumbada en el vació, donde se pierde la partida….  Mientras suena lento y sin cesar el ir y venir del reloj de la entrada, donde me hacen recordar que las calles de la ciudad están llenas de presagios que te ahogan entre el asfalto, que se intentan disolver entre las esquinas de la vida…
           Las farolas, las aceras, el gentío anuncia a gritos  la próxima ubicación del Circo de lo Absurdo, en esa misma plaza, una plaza que contemplo desde la ventana de ese bar a punto de cerrar sus puertas, donde hasta hacia un momento bailaba entre el gentío; la alegría, la rebeldía y la rabia. Danza clásica y  revolucionaria  por la desidia de que  otro mundo es  posible….Y es que la espera es este bar sin humo, sin risas y sin esos llantos. Alma solitaria, que no puede seguir viviendo así…Porque el vivir así, la esta matando lentamente. Es el momento de ceder y entrar de lleno en este  Circo del Absurdo… Quizá precise de una melodía que me de la bienvenida, en la que por un instante haga parar esta representación para poder formar parte de esta obra de teatro… Mientras la alegría, la rabia y la tristeza que se entrelazan danzando sin cesar, me arrancan de ese asiento dormido y me invitan a gritar al mundo que ya nunca más volveré a ser una espectadora …

1 comentario:

  1. cualquiera de las plazas de Gracia, desencadenan en esta melancolia, recuerdo que siempre buscaba mis momentos de paz de la juventud, sentado en una terrazita, degustando una fria cerveza en la Plaça del Sol, son momentos que habiendo pasado mucho tiempo de ellos, me gustaria volver a repetir algun día proximamente, ahi construi sueños, y mis sueños siguen ahi, construyendose dia a dia, no desespero, algun dia seran realidad! gracias por recordarmelos....

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